lunes, 19 de octubre de 2020

Hora Santa en reparación por incendio de iglesia católica en Chile 181020

 



Inicio: ofrecemos esta Hora Santa y el rezo del Santo Rosario meditado en reparación por el incendio de una iglesia en Chile, con la consiguiente profanación de las Hostias consagradas. Para mayor información, consultar el siguiente enlace:

https://www.youtube.com/watch?v=AHga10Gvj84

Oración inicial: “Dios mío, yo creo, espero, te adoro y te amo. Te pido perdón, por los que no creen, ni esperan, ni te adoran, ni te aman” (tres veces).

“Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, yo os ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, Presente en todos los sagrarios del mundo, en reparación por los ultrajes, sacrilegios e indiferencias con los cuales Él mismo es continuamente ofendido. Por los infinitos méritos de su Sacratísimo Corazón y los del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pobres pecadores. Amén”.

Canto inicial: “Postrado a vuestros pies, humildemente”.

Inicio del rezo del Santo Rosario meditado. Primer Misterio (a elección).

Meditación.

          El mundo actual se caracteriza por haberse alejado del Dios Verdadero, del Dios Uno y Trino y de su Mesías, Cristo Jesús, el Hombre-Dios, Presente en Persona en la Eucaristía. El alejamiento de Dios por parte de la humanidad[1] se da en dos direcciones: por un lado, hay quienes niegan y se alejan de Dios porque adhieren al marxismo y comunismo, que son ateos por esencia; por otro lado, hay quienes se alejan del Dios Verdadero porque se dedican a prácticas paganas anti-cristianas y pre-cristianas, que son las prácticas neo-paganas de la Nueva Era.

          Silencio para meditar.

Padrenuestro, diez Ave Marías, Gloria.

Segundo Misterio del Santo Rosario.

Meditación.

          No es inocuo ni neutral el alejarse de Dios de parte de la humanidad: si Dios es el Bien Increado, el alejarse de Dios implica el alejarse de ese Bien Increado y por lo tanto, acercarse y colmarse de toda clase de males. Por otra parte, quien no adora al Dios Verdadero, que se manifestó en Cristo Jesús, quien a su vez se quedó en la Eucaristía para ser allí adorado, termina por adorar a sustitutos falsos de Dios, como el poder, el dinero, la fama, el éxito mundano y, en el peor de los casos, al Ángel caído.

          Silencio para meditar.

Padrenuestro, diez Ave Marías, Gloria.

Tercer Misterio del Santo Rosario.

Meditación.

          ¿De qué manera puede el alma no solo no apartarse de Dios, sino no caer en los errores y herejías de la Nueva Era, la religión del Anticristo? Si son tantos los caminos falsos que alejan al alma del Dios Verdadero? Sí, hay una forma en la que el alma está segura de no caer en los errores y herejías y en el ateísmo marxista y es el consagrarse al Inmaculado Corazón de María, además de rezar el Santo Rosario todos los días[2]. Puesto que la Virgen es la Sede de la Sabiduría y es la que aplasta la cabeza de la Serpiente Antigua, quien se acerca a la Virgen y le pide que lo cubra con su manto, consagrándose a su Corazón y rezando el Santo Rosario, se ve libre de caer en los falsos caminos que apartan del Dios Verdadero.

          Silencio para meditar.

Padrenuestro, diez Ave Marías, Gloria.

Cuarto Misterio del Santo Rosario.

Meditación.

          Cuando el alma se consagra a la Virgen, esto no quiere decir que su vida se convierta en un lecho de rosas; por el contrario, si bien la Virgen preserva de todo error, al mismo tiempo, prepara al alma para que ésta se inmole en el altar de la Santa Cruz, uniéndose a la Víctima Santa y Pura, Jesús, el Cordero de Dios. Quien se consagra a la Virgen, es preparado por Ella para ofrecerse, junto a Cristo, en Él, con Él y para Él, en la Cruz, para la salvación del mundo, para que el mundo vuelva al Dios Verdadero, Dios Uno y Trino.

          Silencio para meditar.

Padrenuestro, diez Ave Marías, Gloria.

Quinto Misterio del Santo Rosario.

Meditación.

          Muchos cristianos, al constatar el estado en el que se encuentra el mundo moderno, un mundo sin Dios, con leyes en las que Dios está ausente, dudan, se asustan y miran con incertidumbre el presente y el futuro[3]. Pero no hay lugar para esto en el cristiano, puesto que tiene que ver la “señal en el Cielo”, anunciada en el Apocalipsis: la Virgen es la “Mujer revestida de sol, con la luna como alfombra a sus pies y doce estrellas como corona luminosa alrededor de su cabeza”. Esta Mujer revestida de sol es la Virgen, que ha de triunfar, con el poder de Dios, sobre dragón rojo, sobre el ateísmo y el neo-paganismo aparentemente triunfantes en nuestros días. La Virgen triunfará por medio del triunfo de su Inmaculado Corazón: “Al fin, mi Inmaculado Corazón triunfará”. No hay otra señal que el Inmaculado Corazón de María, para el triunfo total y completo de Dios sobre el dragón rojo.

          Oración final: “Dios mío, yo creo, espero, te adoro y te amo. Te pido perdón, por los que no creen, ni esperan, ni te adoran, ni te aman” (tres veces).  

“Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, yo os adoro profundamente, y os ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, Presente en todos los sagrarios del mundo, en reparación por los ultrajes, sacrilegios e indiferencias con los cuales Él mismo es continuamente ofendido. Por los infinitos méritos de su Sacratísimo Corazón y los del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pobres pecadores. Amén”.

Canto final: “Plegaria a Nuestra Señora de los Ángeles”.

 

         



[1] Cfr. Stefano Gobbi, La Virgen a sus hijos predilectos, los sacerdotes, Mensaje del 29 de octubre de 1974.

[2] Cfr. ibidem.

[3] Cfr. ibidem, Mensaje en Dongo, 7 de diciembre de 1974.

No hay comentarios:

Publicar un comentario